Cuando mi cabezolo se pone a mil revoluciones y no descansa las horas recomendadas por cualquier especialista en “tener buena cara por la mañana”, suelo decir que me voy a X a coger perspectiva y volver con impulso. Tengo la sensación de que cuando te alejas de la rutina parece que todo se asienta y las cosas verdaderamente importantes vuelven a colocarse en primer lugar y las minucias, o lo que antes resultaba agotador, se ven de otro color. Llevo varias semanas intentando colocarme en este maravilloso punto en el que todo vuelve a su sitio… visitando a mis queridas madrileñas, pedaleando junto a los que más quiero, con fiestas de pijamas e incluso colgándome de 35 m junto a mis queridos frikis bicicleteros, y a pesar de haberme sentido feliz en todos esos momentos, no lo he conseguido. Este fin de semana, tras venirse abajo algunos de los planes que tenía, he empezado a soñar con ellos y con muchos más que han surgido en mi cabezolo y boom! ha vuelto al ángulo desde donde mirar mi pequeño mundillo, me había olvidado de los sueños y de pedalear hacia ellos :)
Os dejo aquí una fotico mu maja del barranco:
Aprovechando X, comunico oficialmente que Y vuelve a ser una incógnita. Así que seguiré por mañolandia unos meses más con un plan B o C... :P.
Os dejo aquí una fotico mu maja del barranco:
Aprovechando X, comunico oficialmente que Y vuelve a ser una incógnita. Así que seguiré por mañolandia unos meses más con un plan B o C... :P.